El departamento de San Andrés y Providencia, con su ubicación aislada y su popularidad turística, enfrenta problemas de adicciones que afectan tanto a residentes como a visitantes. El consumo de alcohol y drogas es común, en parte debido a la influencia del turismo y a la falta de recursos educativos y de empleo para los jóvenes de la región. Estos factores han generado un incremento en los problemas de adicción, que afectan la vida comunitaria en la isla.
Existen centros de rehabilitación en San Andrés que ofrecen ayuda a quienes buscan superar sus adicciones. Estos centros proporcionan programas de tratamiento adaptados a las necesidades de los residentes y ofrecen un espacio seguro para la recuperación y el crecimiento personal.
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